lunes, 10 de marzo de 2008

Más que un resultado, Ramón.



Jugar en la altura no va a ser facil. Ganar, mucho menos. Nuestros dos primeros partidos coperos nos encuentran con 1 punto y la locura que baja desde la tribuna del Ciclón exige esa Copa. Sin embargo, la mesura reina en el banco de suplentes.

Hoy en el pasquín Ole una nota a nuestro entrenador sigue la linea que durante la semana pasada Hirsig y otros integrantes del plantel empezaron a forjar en los medios; el partido en Bolivia no es clave. Para muchos de ellos, perder en los 3.862 metros de la Paz "entra en los papeles" y no define nada. Asi fue como Ramón Diaz dijo que el de mañana "no será un partido decisivo". "no es un partido clave; faltan cuatro, nosotros no analizamos solamente uno y seguramente queremos tener buenos resultados en los cuatro".

Hay más de una razón para explicar este tipo de declaraciones pero todas vierten a un mismo fín; descomprimir la tensión y armar un lindo colchón en caso de una crisis copera si de 9 puntos solo trajimos 1 para Boedo. La inclusión de tanto jugador titular para el partido con la empresa ahora parece tener mucho más sentido si lo que se intenta es mantener a la gente "de su lado". Lo que Ramón y los jugadores no han entendido es que a nosotros no nos tienen que mentir para que los banquemos. El hincha de San Lorenzo no es boludo ni come vidrio. Sabe cuando alentar, cuando presionar y cuando putear. Y tambien sabe donde estamos parados en esta Copa y la necesidad de cambiar la imagen que venimos dando; para nosotros, para ustedes, para el resto de los participantes del torneo.

El de mañana es un partido clave, y no solo por el resultado. Cuando Ramón Diaz hace especial hincapie en los 4 partidos que faltan para ver quienes clasifican a 8vos de final esta meando afuera del tarro. Más vale que faltan 4 partidos, Ramón. Pero el que hay que salir a ganar es el de mañana. No por los 3 puntos (aunque son importantisimos) sino para marcar el compromiso. La gente de San Lorenzo necesita ver un equipo comprometido con la causa Libertadores. Necesita ver 11 tipos que suban los 3.862 metros a recuperar un poco del honor y grandeza que se despilfarraron sin pudor en Venezuela y el torneo local. No nos olvidemos que fueron Uds los que nos llevaron a la calculadora y las conjeturas, haciendo cuentas y revisando numeros para que ni el REAL POTOSI de Bolivia ni el CARACAS de Venezuela nos dejen afuera de nuestra Copa Centenaria. Siendo este el caso, mañana se podrá perder, empatar o ganar, pero la necesidad de un cambio en la actitud y la manera de encarar estos encuentros es lo que todos esperamos, y no solo durante los 90 minutos, sino a lo largo de toda la semana.

Si a horas del partido nuestro entrenador minimiza las consecuencias de un resultado negativo en Bolivia, estamos mal. No es lo que buscamos, no es lo que queremos. Si hay presión, entonces canalicenla positivamente, en lugar de esconderla abajo de la alfombra para disimular el caos que implicaría perder contra un equipo Boliviano que se viene de comer 5 o 6 en Brasil y que despidió a su entrenador hace una semana. Convengamos que si sacar un buen resultado en la altura es complicado, al menos tenemos un rival que da pena y tiene su linda crisis.

Si mañana ganamos, empatamos o perdemos los números seguirán de nuestro lado. Con algunos resultados y trayendonos los 3 puntos de Brasil seguirán vendiendonos que el sueño no se termino. Pero el sueño no es pasar de ronda, el sueño es ganar la Libertadores. Para eso se necesita un equipo serio, con confianza, que no dude de sus capacidades y que se comprometa con los posibles fracasos para entender la magnitud de los posibles logros. Porque hoy estamos en ese camino fragil y angosto que nos puede arrojar hacia el peor de los abismos si perdemos en Bolivia, expectantes si empatamos o gloriosos si traemos los 3 puntos. Esto es futbol y cualquier cosa puede suceder, pero no nos boludeen más. En Bolivia tenemos que empezar a demostrar que somos el gran equipo que desde los microfonos Ramón y companía vienen agrandando desde el verano pero que hasta el momento no esta a la altura de nuestra gente. Solo pedimos que si nosotros pasamos los últimos entretiempos exigiendo por esa Copa, y copamos todas las tribunas alentando más alla de los resultados, entiendan la importancia del partido de mañana. Mañana se define si nos vienen escuchando o no. Si todo este credito que se les extendió los últimos 8 meses del ciclo Ramón tuvo sentido o fue una perdida de tiempo. Mañana no es un resultado; mañana es empezar a respetar nuestra grandeza. Salgan a ganar, que despues pase lo que tenga que pasar, pero matense por esos 3 puntos.

1 comentario:

norber dijo...

Excelente negro, 100% de acuerdo. Hay que ganar de una vez y que se dejen de chamuyos, mañana se define la clasificacion a la copa. Un abrazo.