viernes, 27 de marzo de 2009
PA, análisis del Dictamen de la Comisión Fiscalizadora
La Comisión Fiscalizadora dio a conocer un informe en el que se detallan diversas desprolijidades y aconseja la desaprobación del Balance del ejercicio julio 2007 - junio 2008 en la próxima reunión de la Asamblea de Representantes.
El saber popular enseña que para hacerse una idea clara de las cosas hay que escuchar “las dos campanas”. Mientras la actual conducción se jacta de haber colocado a San Lorenzo por encima de los grandes de Avellaneda y de tener un proyecto ambicioso y a largo plazo, las conclusiones del trabajo esforzado y “menos mediático” de otros referentes revelan una situación que está lejos de ser sólida y transparente.
En el informe de la Comisión Fiscalizadora, órgano del Club encargado de llevar a cabo controles internos sobre el registro de ingresos y egresos y sobre la confección de los cuadros financieros y del Balance, se explica que son una práctica habitual los pagos sin comprobantes, con documentación informal o sin la autorización explícita de algún miembro de la Comisión Directiva.
Otro de los puntos destacados del documento elaborado por Carlos P. Sánchez, Gustavo Rodríguez y Uriel Barros, es que no hubo rendición de cuentas por parte de la Comisión del Centenario. Si bien el oficialismo declaró en varias oportunidades que el festejo central no tendría costo alguno para el CASLA, la información proporcionada al respecto no es confiable, por lo que los fiscalizadores no pueden asegurar paridad entre ingresos y gastos. También subrayaron que no se computaron ingresos por la televisación de la fiesta.
A estas desprolijidades se le suman, según el informe, los retrasos excesivos e injustificados en la elaboración de los cuadros financieros mensuales y del Balance del ejercicio anual (en la última reunión de Comisión Directiva, celebrada el jueves 12 de febrero de 2009, se trataron los cuadros correspondientes a julio y agosto de 2008); la falta de presentación de la Memoria; y la discordancia entre las fechas de la firma del dictamen de los auditores externos contratados por el CASLA y la confección real del Balance. El dictamen lleva la fecha del 31/11/08 mientras que el Balance definitivo se obtuvo recién en diciembre de 2008, por lo que los auditores prestaron su certificación sobre una primera versión.
El dato más significativo para el futuro institucional del Club es la constatación de que el resultado económico real, más allá del informado (cercano al déficit de $6.000.000), es una pérdida de $ 12.370.000 para el período julio 2007 - junio 2008, más de $1.000.000 de pesos por mes. En términos precisos, en sólo un año el Pasivo aumentó un 12% y el Activo disminuyó un 3%.
Con estos argumentos los fiscalizadores creen conveniente que los Asambleístas rechacen el Balance, con lo que reclaman un cambio urgente en el rumbo político, administrativo y financiero por el que ha optado el actual oficialismo.
PROGRESO AZULGRANA
El saber popular enseña que para hacerse una idea clara de las cosas hay que escuchar “las dos campanas”. Mientras la actual conducción se jacta de haber colocado a San Lorenzo por encima de los grandes de Avellaneda y de tener un proyecto ambicioso y a largo plazo, las conclusiones del trabajo esforzado y “menos mediático” de otros referentes revelan una situación que está lejos de ser sólida y transparente.
En el informe de la Comisión Fiscalizadora, órgano del Club encargado de llevar a cabo controles internos sobre el registro de ingresos y egresos y sobre la confección de los cuadros financieros y del Balance, se explica que son una práctica habitual los pagos sin comprobantes, con documentación informal o sin la autorización explícita de algún miembro de la Comisión Directiva.
Otro de los puntos destacados del documento elaborado por Carlos P. Sánchez, Gustavo Rodríguez y Uriel Barros, es que no hubo rendición de cuentas por parte de la Comisión del Centenario. Si bien el oficialismo declaró en varias oportunidades que el festejo central no tendría costo alguno para el CASLA, la información proporcionada al respecto no es confiable, por lo que los fiscalizadores no pueden asegurar paridad entre ingresos y gastos. También subrayaron que no se computaron ingresos por la televisación de la fiesta.
A estas desprolijidades se le suman, según el informe, los retrasos excesivos e injustificados en la elaboración de los cuadros financieros mensuales y del Balance del ejercicio anual (en la última reunión de Comisión Directiva, celebrada el jueves 12 de febrero de 2009, se trataron los cuadros correspondientes a julio y agosto de 2008); la falta de presentación de la Memoria; y la discordancia entre las fechas de la firma del dictamen de los auditores externos contratados por el CASLA y la confección real del Balance. El dictamen lleva la fecha del 31/11/08 mientras que el Balance definitivo se obtuvo recién en diciembre de 2008, por lo que los auditores prestaron su certificación sobre una primera versión.
El dato más significativo para el futuro institucional del Club es la constatación de que el resultado económico real, más allá del informado (cercano al déficit de $6.000.000), es una pérdida de $ 12.370.000 para el período julio 2007 - junio 2008, más de $1.000.000 de pesos por mes. En términos precisos, en sólo un año el Pasivo aumentó un 12% y el Activo disminuyó un 3%.
Con estos argumentos los fiscalizadores creen conveniente que los Asambleístas rechacen el Balance, con lo que reclaman un cambio urgente en el rumbo político, administrativo y financiero por el que ha optado el actual oficialismo.
PROGRESO AZULGRANA
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario