GRACIAS POR OTRA FRUSTRACION

Año del Centenario, ¿por donde viajaba la ilusión de todos los cuervos en enero del presente año? ¿Dónde estábamos posicionados? ¿Cuál era nuestro horizonte más cercano? Cumplíamos 100 añosy jugábamos la Copa. Teníamos todas las fichas puestas en dar vuelta nuestra historia.

Iniciamos el año desprolijamente, desarmando la columna vertebral del equipo campeón, pero aún así, con la ilusión intacta. Sin embargo, un clásico signo de nuestros fracasos empezaba a avizorarse.

Las incorporaciones millonarias llegaron por la ventana, tardíamente y sin preparación previa. Las caprichosas incorporaciones familiares, también llegaban. Planificación cero, ilusión 100 %.

El inicio del campeonato y de la copa siguió esa lógica inflexible. La improvisación llenó de nubarrones el futuro del semestre. Sin embargo se siguió adelante y la epopeya del Monumental nos hizo, casi, tocar el cielo con las manos. Pero las cimas las conquistan las personas, grupos ó instituciones que trabajan arduamente, con capacidad, inteligencia y planificación.

La maldita y miserable novela que actuaron los artífices del equipo y su conducción técnica terminó hundiendo la ilusión con una canchereada payasésca y una serie de penales malograda. La copa nuevamente nos daba la espalda ó, para ser más precisos, nuevamente la institución no estaba a la altura de conquistarla. Nos quedaba el campeonato local, pero él desánimo, el circo entre el plantel y su técnico, el conventillo armado por todos los actores y alguna lesión, nos dejó con las manos vacías. Las manos vacías, pero los bolsillos llenos de dudas y deudas.

Pero en medio de todo ello, tuvimos nuestra fiesta del centenario. Una fiesta en la cual nos hubiera gustado ver alguna mención a la Gloriosa Hinchada que impidió en la época del sultanato, la privatización de la institución, y su posterior casi segura quiebra. Seguramente era un hito demasiado importante como para ser mencionado en el festejo; tal vez por eso se eligió omitirlo. Terminó el semestre y el ciclo de la conducción técnica. San Lorenzo clasificado para la copa Sudamericana comenzó a rearmarse. ¿Comenzó a rearmarse? Nombró cuerpo técnico y reformuló la dirección de las inferiores. Pero la perinola de la formación del plantel volvió a trotar al ritmo que le impulsaron intereses de los que habían puesto el dinero.

Así llegamos al segundo partido por la copa y a la eliminación. Con un plantel que no se sabe, aún hoy, cuál es, ni menos aún, cuál va a ser. Aún hoy no se sabe quién se va, quien viene, por cuánto tiempo, por cuánta plata, ni quién pone el dinero. Año del Centenario. Frente a la desolación del presente lo que queda es la alternativa de la REFUNDACIÓN. Aunque algunos sólo parecen interesados en la refundición.

Re-fundación esencial si San Lorenzo quiere recobrar su destino dilapidado.

Re-fundación que requiere volver a basar la institución en su grandeza, en su historia y en su potencial de futuro.

Re-fundación que se sustenta en generar nuevamente el centro de las actividades en nuestra cuna de Av. La Plata. De crear desde allí el polo de atracción que nos permita recaptar a las decenas de miles de socios que se perdieron en los últimos 25 años.

Re-fundación que permita y estimule la formación de jugadores propios y de actividades deportivas y recreativas sociales para poner a la Institución en el lugar más alto de nuestra sociedad.

Re-fundación que pueda convivir e impulsar los aportes de inversores, pero con la debida y seria planificación y organización.

En definitiva, la sumatoria de los fracasos a los que arribamos en este año nos lleva a una disyuntiva: San Lorenzo de Almagro, institución civil sin fines de lucro, abandona las políticas de mediocridad y se define como la institución que puede y debe ser ó el próximo capítulo del club podrá llamarse, anticipadamente, desde ahora crónica de una muerte anunciada.

DEBOEDOVENGO